Bacalao con tomate
El bacalao es uno de los protagonistas de las comidas de Semana Santa. Luce igual de bien en un potaje de cuaresma, que frito, en pavías, croquetas, revuelto con patatas, en tortillitas, en guiso con patatas y arroz,... pero es en tomate como más nos gusta en casa y no falta en estas fiestas.
La calidad del ingrediente principal es muy importante en cualquier receta, pero en el caso del bacalao, la calidad es determinante para el éxito del plato. Así para este plato hemos comprado unos hermosos lomos de bacalao salado, que se salen algo del presupuesto, es cierto, pero hay que tener en cuenta que no es un plato de diario.
Ingredientes:
Un kilo de lomos de bacalao en salazón
Un vaso de aceite de oliva para freír
Una cebolla mediana
Un cuarto de pimiento rojo
Una lata de tomate triturado de buena calidad
Una pizca de pimienta negra y sal
Elaboración:
Desalamos el bacalao poniendo los lomos en agua fría 24 horas antes de la elaboración de la receta. Debemos cambiarle el agua de cuatro a seis veces durante ese periodo de tiempo. Se escurren bien.
Pasamos los lomos por harina y los freímos en aceite de oliva hasta que tengan un ligero color dorado. Reservamos.
Retiramos parte del aceite y preparamos un sofrito con el resto, la cebolla picada muy finamente, el pimiento rojo en juliana y un diente de ajo picado. Los cortes de las verduras en esta elaboración son muy importantes.
Cuando la cebolla esté dorada añadimos el tomate triturado y lo freímos a fuego muy lento. Cuando el tomate esté al punto, colocamos cuidadosamente los lomos de bacalao que ya teníamos preparados sobre el sofrito.
Salpimentamos y dejamos cocinar unos minutos. Listo para servir.
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